lunes, 4 de enero de 2010

Independencia Hispanoamericana

Un viejo profesor...alumnas sin interés,he aquí yo,en clase, llegué tarde,como de costumbre siempre despistada me fui a buscar a mis compañeras en otras aulas.
Hoy el día transcurre rápido,pero más rápido transcurren los días festivos.
Prisciliano,así se llama mi profesor de historia,un nombre extraño y que suena a antiguo,tan antiguo como él.Es primera hora,hoy al salir de mi casa a toda prisa ya fui malhumorada,y esque tengo varias razones para estarlo,aparte siento agobio con mis tareas escolares,lo que más he deseado estos días ha sido dormir en mi cama...abrazar mi almohada y poder leer relajadamente mientras pasan las horas del reloj.
Ayer me sentía dichosa aún habiendo aguantado las quisquilleces de mi repelente hermana me sentía felíz,pero todo se esfumó al hablar con una persona...nos enfadamos por una estúpida cuestion,pero no fue exactamente por eso por lo que me "deprimí" si no por sus secretos...nunca me atreveré a decir porque me sentó tan mal,pero esque solo hay una persona que pueda saber el motivo y esa persona soy yo.
Los buenos secretos se quedan para uno mismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario